Los Angeles Lakers han sacudido la Conferencia Oeste con un movimiento impactante: la adquisición de Luka Doncic en un intercambio con los Dallas Mavericks, que recibieron a Anthony Davis a cambio. Aunque inicialmente parecía un canje basado en la compensación de talento y salarios, la dueña del equipo, Jeanie Buss, reveló que la decisión tenía razones estratégicas y de vestuario.

En una entrevista con National Public Radio, Buss explicó que la llegada de Doncic era fundamental tras tres eliminaciones consecutivas a manos de los Denver Nuggets en los playoffs. Además, señaló que Davis no estaba conforme con su rol en la cancha, lo que afectaba su rendimiento y felicidad.

“Hemos perdido los tres últimos años seguidos contra los Denver Nuggets en los playoffs, y realmente no teníamos nada que fuera a parecer diferente al entrar de nuevo en los playoffs”, comentó Buss. “Anthony Davis se quejaba de dónde le tocaba jugar y no estaba contento”.

Davis había expresado su preferencia por jugar como ala-pívot en lugar de pívot, lo que llevó a los Lakers a reforzar la pintura con Alex Len tras el canje con Dallas. Sin embargo, la gerencia decidió apostar por una transformación más profunda con la llegada de Doncic, un jugador generacional.

Buss también comparó este traspaso con el histórico movimiento que llevó a Pau Gasol a los Lakers en 2008, recordando cómo aquel fichaje fue clave para la obtención de títulos.

“Aprendí de mi padre y del traspaso de Pau Gasol”, recordó Buss. “Gregg Popovich y Mark Cuban se molestaron porque nunca tuvieron la oportunidad de pujar por él. Con Luka, hicimos algo similar”.

El fichaje de Doncic marca una nueva era para los Lakers, que buscan volver a la cima de la NBA con un jugador que podría ser el sucesor de LeBron James en la franquicia.