Lima.- De niña, Andrea Altamirano veía asombrada cómo su papá con mucha pasión y alegría construía de manera empírica todo en casa. Desde los corrales para los animalitos que criaban en su hogar, en el corazón de la campiña de Ica, hasta los galpones para los gallos. Ese fue el inicio del descubrimiento de su vocación: la ingeniería civil. Hoy, la talento, quien estudia la Maestría de Ingeniería e Integración de Sistemas Ferroviarios en la Universidad de Birmingham en Reino Unido con la Beca Generación del Bicentenario del Pronabec, desea mejorar el trasporte público en el Perú a través de la implementación de un sistema ferroviario moderno y eficiente.

“La industria ferroviaria representa uno de los sistemas de transporte con mayor interés en el mundo, gracias al gran valor de flexibilidad, capacidad, reducción en el tiempo de viaje y transportes seguros con baja siniestralidad. Además, es amigable con el medioambiente porque la energía que se requiere para propulsar los trenes es eléctrica, es decir, bajos niveles de CO2”, explica Andrea de 31 años. Sabe que el Perú tiene un gran potencial para el desarrollo de una red de trenes, sistema de transporte que se ha convertido en vanguardia en importantes países del mundo, como China, la India y Reino Unido.

Su pasión por este tipo de trasporte nació en el 2018. Años después de haber egresado entre los primeros puestos de la carrera de Ingeniería Civil en la Universidad Nacional San Luis Gonzaga de Ica, Andrea volcó todos sus conocimientos en una importante empresa constructora en el rubro minero. Esta experiencia le permitió viajar por diferentes partes del Perú y conocer realidades diversas, pero con un denominador común: los deficientes medios de trasportes con las que cuentan las ciudades y pueblos de nuestro país. Tenía la certeza que hacía falta un cambio, pero no estaba segura por dónde empezar.

Las respuestas a sus interrogantes las encontró cuando ingresó al proyecto de ampliación de la Línea 1 del Metro de Lima. Supo que lo suyo eran los trenes, un rubro que se piensa que solo es para hombres. “A finales de ese año se terminaba un proyecto y a la vez iniciaba otro, que era mi proyecto personal, crecía la curiosidad de conocer más acerca de esta nueva tendencia como es la industria ferroviaria, un sistema de transporte innovador, flexible, rentable y sostenible que cada día crece por todas las ventajas que ofrece”, asegura con entusiasmo Andrea desde el Reino Unido.

El camino no fue fácil para que la talento logre sus objetivos. Inició su búsqueda por Google y todos los programas de alta gama le dirigían a Europa y Asia. Como parte del destino, Andrea logró comunicarse con una compañera del trabajo que no veía años y le contó sobre la Beca Presidente de la República, hoy Beca Generación del Bicentenario del Pronabec del Ministerio de Educación. “Tú tienes que pensar que todo es sencillo, a pesar que el camino es difícil y complejo”, recuerda que fueron las palabras de aquella amiga, suficientes para que Andrea decida ir por sus sueños.

Pero había un gran inconveniente: no dominaba el inglés, uno de los requisitos que le pedía la Universidad de Birmingham para darle la ansiada carta de aceptación. Entonces, sus padres la animaron a no desistir. “Me matriculé en un ciclo intensivo en un instituto, trabajaba todo el día en una obra y sentía que ya no tenía energía, me quedaba dormida en el comedor. Estudiaba todos los días y los fines de semana, dupliqué los esfuerzos para lograrlo. El día que vi mis resultados, luego de varios intentos, fui muy feliz”, señala.

El 25 de agosto del 2020, a las 11:50 p. m., es una fecha que Andrea nunca olvidará. Después de meses de esfuerzo y espera, revisó los resultados del concurso Beca Presidente (hoy Beca Generación del Bicentenario) en la página web del Pronabec y vio su nombre en la lista de ganadores. “Obtener esta beca es como sacarse la lotería. Es una excelente oportunidad porque te abre los ojos al mundo para aplicar los conocimientos en el Perú”, señala la ingeniería civil. Ella sabe que perfeccionar el trasporte público no solo se trata de que las personas viajen más cómodo y rápido, sino también brinda calidad de vida, porque permite reducir de manera significativa el estrés y la ansiedad y ayuda a que los peruanos puedan compartir con la familia y desarrollar actividades de ocio.

Como parte de la maestría que cursa, Andrea, junto con compañeros de diferentes grados, viene participando en el Railway Challenge (www.imeche.org/events/challenges/railway-challenge/about-railway-challenge), organizado por la Institución de Ingenieros Mecánicos (IMechE), asociación profesional y científica con sede en Londres, donde se requiere diseñar, fabricar y poner en marcha una locomotora ferroviaria en miniatura.

El evento se realizará entre junio y julio del 2021 en Stapleford, Nottingham, Reino Unido. Ella es una embajadora de nuestro país, ya que es la única peruana que estudia en la Universidad de Birmingham. “Es una gran oportunidad compartir con estudiantes de diferentes culturas y experiencia de países donde la industria ferroviaria está muy desarrollada”, señala.

Así como los trenes son su pasión, Andrea tiene como principal motor a su familia. Son ellos quienes siempre la han apoyado en cada proyecto que se ha embarcado, por más difícil que parezca. La fuerza la ha heredado de su madre ayacuchana y la perseverancia, de su padre, de raíces andahuaylinos. Dos de sus hermanos, que son gemelos, también se han enfocado en la ingeniería civil, porque lo bueno se hereda y se forma. “¡Piensa grande y serás grande!”, es la frase que su padre siempre le repite a Andrea y que ella lleva en su corazón para seguir en búsqueda de sus metas.