La rosácea es una enfermedad de la piel que se presenta en un 10% de la población peruana, y que se agrava en el verano de nuestro país producto de los golpes de calor. Solo en el mes de febrero se han registrado temperaturas de hasta 37ºC, hecho que empeora la condición de personas que padecen esta enfermedad.
Es una enfermedad dérmica crónica a nivel facial, que aparece en distintos periodos de la vida de una persona, se desconocen las causas exactas que originan esta enfermedad, pero según comenta la Dra. Diana Mestanza, dermatóloga de Zazá Med Laser Center, estás serían las causas que pueden ser un desencadenante de un brote:
1. Temperaturas extremas: Estar expuesto tanto a calor intenso como frío extremo son los principales motivos de aparición de la enfermedad. La exposición a los rayos UV del sol suelen ser un agravante serio para esta enfermedad.
2. Alteraciones hormonales: Producidas durante los ciclos menstruales, embarazos, la menopausia u otros.
3. Estrés emocional: Estar sometido bajo estrés constante puede originar y mantener la enfermedad por meses si no se toman las medidas adecuadas.
4. Hábitos tóxicos: Tomar bebidas alcohólicas en exceso y el consumo de tabaco también son desencadenantes para esta enfermedad.
5. Consumo de alimentos irritables: Las bebidas muy calientes, la comida con muchas especias y picantes son otro intensificador.
Muchas personas suelen confundir esta enfermedad con acné excesivo e incluso con alguna otra afección a la piel. Por ello, la especialista en dermatología nos comparte 3 de los principales síntomas que padece una persona con rosácea:
1. Enrojecimiento facial: Producida por el aumento de flujo sanguíneo.
2. Aparición de pápulas y pústulas: Son protuberancias similares al acné que podrían contener pus.
3. Sensación de ardor: Irritabilidad de la piel en las zonas donde se padece esta enfermedad. Hay que tener en consideración si cuentas con familiares cercanos que lo padecen dado que podría ser hereditario en algunos casos.
Tomando en cuenta lo preocupante que es la enfermedad, la especialista nos comparte algunos de los cuidados que podrían mantener inactiva la enfermedad, dado que sabemos que es incurable, estos son:
Mantener poco contacto con la luz solar, en especial en las horas donde hay mayor exposición por rayos UV, entre las 11 a.m y 4 p.m, y utilizando los elementos apropiados para este verano como gorros, lentes con filtro UV y protectores solares por arriba de los 50 FPS (factor de protección solar).
Alimentación rica en antioxidantes, como frutas y también grasas insaturadas como alimentos ricos en omega 3 y 6, los cuales pueden ser: Pescados, mariscos, nueces, semillas, quinoa, cereales integrales, huevo y consumir mucha agua para mantener la piel siempre hidratada.
Tratamiento médico-estéticos que generen hidratación y efectos antiinflamatorios como el Astrodome facial: Este tratamiento de oxígeno utiliza tanto luz pulsada como calor infrarrojo para regenerar activamente las células de la piel, rejuvenecerla y regenerar el Oxycryo el cual actúa como una terapia curativa de la piel; también, tratamientos láser como Luz Dye la cual entrega energía directamente a los vasos sanguíneos, cerrandolos de manera efectiva y segura.