Toyota dio otra muestra de su compromiso con el desarrollo económico y social de la región de América Latina al colocar la piedra fundamental de su segunda fábrica en Sorocaba, en el estado de San Pablo en Brasil, en una ceremonia a la que asistieron autoridades, empleados y socios comerciales. La iniciativa forma parte del mayor plan de inversiones de Toyota en ese país: 2.000 millones de dólares hasta 2030, que le permitirán a la empresa ampliar la capacidad de producción de vehículos y motores, además de presentar dos nuevos modelos híbridos flex, que combinan la electrificación con el uso de biocombustibles con destacada eficiencia energética y alta tecnología.

Las obras de ampliación del parque industrial de Sorocaba se llevan a cabo en un terreno de 400.000 m², el equivalente a 40 campos de fútbol. Se trata de una de las mayores obras de terraplén que se están realizando en el Estado de São Paulo en la actualidad. La nueva fábrica tendrá un área total de 160.000 m², con inicio de operaciones previsto para 2026.

Al igual que la fábrica actual, la nueva unidad contará con el proceso completo de producción de los vehículos: estampado, carrocería, pintura y montaje. La ampliación también le permitirá a Toyota aumentar de forma sólida y significativa su capacidad de producción local, apoyando la expansión de las ventas y exportaciones a 23 países de la región.

Como resultado del ciclo de inversiones en Brasil, el parque industrial de Sorocaba creará 2.000 nuevos puestos de trabajo hasta 2030. Solo la ampliación de la planta de Sorocaba permitirá la creación de 500 nuevos puestos de trabajo a partir de 2026. Sumando a los empleos indirectos, esta iniciativa puede representar aproximadamente 10 mil puestos de trabajo en la cadena de producción.

“Toyota ha invertido intensamente en Brasil en los últimos años y tiene planes ambiciosos para acelerar aún más nuestras operaciones en el país. La expansión de la planta de Sorocaba nos permitirá ampliar nuestra producción local, exportar a toda la región y así generar y distribuir más valor a toda la sociedad, en forma de empleos y desarrollo económico”, comentó Rafael Chang, CEO de Toyota para América Latina y el Caribe.

La inversión de 2.000 millones de dólares y el proyecto de ampliación del parque industrial de Toyota en Sorocaba fueron posibles gracias a iniciativas favorables y a la mejora del entorno empresarial implementadas por el Estado de São Paulo, que contribuyeron sustancialmente a la promoción de la competitividad y la previsibilidad de las actividades del sector industrial.

Introducción de nuevos modelos electrificados

La ampliación del parque industrial permitirá a Toyota introducir nuevos modelos equipados con la innovadora y pionera tecnología híbrida flex, con el objetivo de consolidar el liderazgo de la marca en el país en electrificación y reforzar las exportaciones a varios países de la región.

El nuevo parque industrial será responsable de la fabricación de un nuevo vehículo híbrido compacto flex, con producción confirmada a partir de 2025, además de la fabricación de un modelo inédito equipado con la misma tecnología. Ambos modelos ayudarán a democratizar la tecnología híbrida flex, reconocida por ser práctica, accesible y sostenible.

“La fabricación de los nuevos modelos híbridos flex, que combinan la electrificación con los biocombustibles, demuestra el compromiso de Toyota de liderar la transición hacia una movilidad más sostenible, ofreciendo soluciones que impacten positivamente en el medio ambiente y en la sociedad en su conjunto”, afirmó Evandro Maggio, presidente de Toyota de Brasil.

Localización de piezas y componentes

El aumento de la capacidad de producción y la introducción de nuevos modelos electrificados también producirán resultados positivos para el parque de proveedores, ya que permitirá la localización adicional de piezas, componentes y sistemas de alta tecnología, contribuyendo a la intensificación de la cadena de producción local. Como resultado, habrá una atracción de inversiones para el desarrollo de nuevas tecnologías y proveedores, generando aún más empleo e ingresos para Brasil.

“La ampliación de la planta de Sorocaba promoverá el desarrollo de la cadena de suministro de componentes para vehículos electrificados, apoyando así el proceso de descarbonización de la movilidad en el país y en toda la región latinoamericana”, añadió Evandro Maggio.