A vísperas de un nuevo año, las empresas definen metas y perspectivas para potenciar sus ventas, buscando crecimiento, profesionalización de su gestión y sostenibilidad operativa en un entorno de costos volátiles. En este contexto, el financiamiento de mediano plazo emerge como un impulso decisivo para viabilizar inversiones estratégicas sin comprometer la caja diaria del negocio.

Este tipo de financiamiento es crucial porque permite a las compañías adquirir activos que, por su naturaleza, requieren tiempo para generar un retorno de inversión (como maquinaria especializada, flotas de vehículos o la ampliación de locales), manteniendo un flujo de caja saludable durante la etapa de implementación. Ante este panorama, Martin Wu Laguna, Gerente de División de Banca Empresa de Alfin Banco, detalla seis beneficios clave más valorados al acceder a este tipo de soluciones financieras.

  1. Cuotas manejables con plazos extendidos. Los plazos de hasta 60 meses permiten que los pagos se alineen con la productividad gradual del activo financiado. Esto evita presiones de caja iniciales y facilita la recuperación de la inversión sin descuidar la operación habitual del negocio.
  2. Periodo de gracia flexible. Contar con hasta 12 meses de gracia permite a las empresas instalar equipos, habilitar locales y obtener permisos antes de asumir la primera cuota. Esta flexibilidad es crucial para no descapitalizarse durante la etapa de implementación del proyecto.
  3. Montos y tasas a medida. La evaluación crediticia define condiciones (monto y tasa) acordes al historial y a los flujos reales del cliente. Este enfoque fortalece la sostenibilidad del crédito y recompensa la buena gestión financiera.
  4. Garantías adaptables. Se acepta una variedad de garantías como inmuebles, maquinaria, vehículos, fideicomisos de activos o flujos, y garantía líquida. Esta flexibilidad amplía el acceso al financiamiento, especialmente para empresas en fase de crecimiento.
  5. Protección de la inversión mediante seguros. El seguro multirriesgo y el endoso de pólizas sobre las garantías protegen la inversión ante eventos imprevistos. Esto asegura la continuidad del negocio y ofrece una estructura de riesgo más sólida para todas las partes involucradas.
  6. Asesoría personalizada. El acompañamiento técnico de un funcionario de negocio ayuda a estructurar el crédito con el plazo, la gracia y la garantía más adecuados, además de agilizar trámites. Esto reduce tiempos y facilita la ejecución del proyecto sin contratiempos.

El financiamiento de mediano plazo se ha consolidado como un aliado estratégico para que las empresas peruanas crezcan de manera ordenada y sostenible. “Nuestro objetivo es que más negocios encuentren una estructura de financiamiento que se adapte a su realidad, les permita invertir sin afectar su liquidez y fortalezca su capacidad de competir. Cuando el crédito está bien diseñado, se convierte en una herramienta que impulsa la productividad y abre nuevas oportunidades”, señaló Martin Wu, Gerente de División de Banca Empresa de Alfin Banco.