En el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, COP26, CAF -banco de desarrollo de América Latina-, realizó la presentación de índices de vulnerabilidad al cambio climático y planes de acción para varias ciudades de Latinoamérica, entre ellas Trujillo y Piura.
Como parte de la iniciativa LAIF sobre ciudades y cambio climático de la Unión Europea, CAF y la AFD desarrollaron dos estudios Índice de Riesgo al Cambio Climático (IRCC), los cuales se centraron en la identificación y priorización de medidas concretas de adaptación, a partir de la evaluación de riesgo para los peligros de déficit hídrico, inundación por desbordamiento del río Piura e inundaciones por cuencas ciegas en Piura, así como de inundación por desbordamiento del río Moche, inundaciones por huaicos y erosión costera en Trujillo.
En los estudios del IRCC se incorpora el Plan de Adaptación al Cambio Climático (PACC), el cual presenta un portafolio de medidas y proyectos así como una hoja de ruta que brinda las recomendaciones necesarias para una mejor orientación sobre los riesgos climáticos en estas ciudades y sus respectivas cuencas hidrográficas. El objetivo general del PACC es identificar y priorizar las medidas de adaptación, asociadas a los resultados de las IRCC. El PACC se divide en tres programas graduales y complementarios entre sí: i) mitigación del riesgo, ii) resiliencia urbana y iii) recursos naturales y producción rural, junto a un componente transversal de conocimiento, gobernanza y gobernabilidad que facilita su propia implementación.
Para el caso de Trujillo, los resultados indican que 87.782 habitantes se encuentran en áreas de peligro. La población e infraestructura ubicada en los sectores urbanizados de Santa Teresa de Ávila y Los Naranjos se verán afectados por el huaico de la quebrada San Idelfonso, entre otras áreas, lo cual las vuelve prioridad en su intervención cuando se implemente el PACC.
Por otro lado, el IRCC en el caso de Piura indicó que en las últimas tres décadas la huella urbana aumentó seis veces su tamaño, por lo que la planeación urbana debe ir de la mano con las acciones de adaptación al cambio climático. Asimismo, 87.910 habitantes se encuentran en áreas de peligro que se verán afectadas por inundaciones asociadas al desbordamiento del río Piura, lo cual las vuelve objeto de acción prioritaria.
En este estudio, se identifica qué tan vulnerables son los distintos sectores que conforman Trujillo y Piura y sus respectivas cuencas hidrográficas y se abre la posibilidad de proponer planes de acción integrales que promuevan la seguridad de los habitantes y un conocimiento íntegro sobre cómo adaptarse al avance del cambio climático y los posibles peligros que y ase insinúan y que se prevé vendrán en aumento. Parte de las recomendaciones que se brinda en las publicaciones es iniciar la implementación de las medidas de adaptación en la mayor brevedad posible, promover la transferencia del conocimiento generado y continuar cerrando brechas que impiden avanzar hacia la acción. Finalmente, a partir de su implementación, es necesario evaluar la posibilidad de consolidar la metodología de estimación del IRCC y la formulación del PACC para replicarlos en otras ciudades de Perú.
Por último, cabe señalar que estos análisis y planes se realizaron con la participación activa y el consenso con los actores de los sectores público, privado y de la academia de Trujillo y Piura buscando con ello facilitar el entendimiento de la problemática y tender un puente entre el diagnóstico, las medidas de adaptación, las herramientas de planificación y las fuentes de financiación para con ello promover acciones concretas para enfrentar los retos del cambio climático en el contexto urbano.
CAF -banco de desarrollo de América Latina- tiene como misión impulsar el desarrollo sostenible y la integración regional, mediante el financiamiento de proyectos de los sectores público y privado, la provisión de cooperación técnica y otros servicios especializados. Constituido en 1970 y conformado en la actualidad por 19 países -17 de América Latina y el Caribe, junto a España y Portugal- y 14 bancos privados, es una de las principales fuentes de financiamiento multilateral y un importante generador de conocimiento para la región.