El aumento constante de la demanda de Internet de alta velocidad ha impulsado a las empresas de telecomunicaciones a buscar formas de optimizar sus implementaciones de FTTX (Fiber to the X). Por ello, para asegurarse de brindar una cobertura eficiente que satisfaga las necesidades de sus usuarios y maximice su retorno de inversión, deberán enfocarse en la eficiencia.

“Un despliegue exitoso requiere de un enfoque estratégico que tenga en cuenta varios factores, ya que es una infraestructura compleja que incluye cables de fibra óptica, equipos de red, dispositivos de terminación y otros componentes esenciales. Por ello, comprender su funcionamiento y cómo se interconectan los diferentes elementos es fundamental”, explicó Andres Esteban Vásquez Cubillos, especialista de Expansión de InterNexa.

Desde la planeación es indispensable la identificación de puntos clave sumado a la densidad de usuarios concentrados por área. Por ello, antes de realizar la implementación de FTTX, es importante considerar tres factores que pueden afectar la calidad y la cobertura del servicio:

  • Densidad de población: influye en la estrategia de implementación, puesto que, en áreas urbanas muy pobladas, el despliegue de la red puede ser más eficiente, maximizando su potencial y los costos de implementación. A nivel rural, los costos, la geografía y la infraestructura son un desafío para lograr la cobertura esperada.
  • Topografía y geografía: estas pueden presentar desafíos adicionales. Terrenos montañosos o difíciles aumentan los costos y la complejidad del tendido de fibra óptica.
  • Demanda del usuario: comprender sus necesidades y expectativas es esencial. Realizar estudios de mercado y sus tendencias puede proporcionar información valiosa para adaptar la implementación de FTTX acorde a sus requerimientos.

“Para optimizar la implementación de FTTX es necesario seguir las estrategias mencionadas, ya que permitirá a las empresas maximizar la capacidad de la red y ofrecer una experiencia de usuario excepcional. También es fundamental el monitoreo continuo de la red, realizar mejoras y expansiones, así como mantener una comunicación abierta con los usuarios para comprender y satisfacer sus necesidades cambiantes”, finalizó Vásquez.