De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), casi 600 mil peruanos se volvieron pobres el año pasado. En este contexto de recesión económica, cobra mucha más relevancia el trabajo que realizan los comedores populares, pequeñas organizaciones que luchan contra el hambre y la malnutrición.

Desde el 2018, “Cocinas Bondadosas” brinda acompañamiento a las madres de comedores populares, con el objetivo de empoderarlas, a través del fortalecimiento de sus capacidades en nutrición, optimización culinaria y reducción de desperdicios. Hasta el momento, el programa ha capacitado a más de 600 mujeres de 52 comedores de Lurín y 12 de Villa El Salvador.

Este acompañamiento a las cocineras sirve también en empoderarlas mediante el fortalecimiento de sus capacidades culinarias, haciendo hincapié en la alimentación sustentable y la reducción de desperdicios.

Desde cocinar cáscara de alverja hasta hacer un pastel de cáscara de plátano, las cocineras han logrado tener un triple impacto en sus comedores, ya que, al aprender a reducir residuos, alimentan a más personas con menos presupuesto y rescatan nutrientes que de otra forma, se desperdiciarían.

«Pensamos en los comedores populares como auténticos restaurantes, donde cada persona tiene derecho a disfrutar de una experiencia culinaria de calidad», afirmó Palmiro Ocampo, chef a cargo del programa. «Por eso, en ‘Cocinas Bondadosas’ compartimos nuestros conocimientos a través de talleres que incluyen la preparación de menús con ingredientes como sangrecita, hígado y pescado, alimentos fundamentales
en la lucha contra la anemia. También enseñamos el aprovechamiento de cáscaras de verduras y frutas, buscando transformar ingredientes simples en preparaciones nutritivas, deliciosas y accesibles económicamente», añadió.

Asimismo, el programa trabaja capacitaciones con madres de familia de dos grupos etarios importantes: niños menores de 5 años y niños de 5 a 17 años, a los cuales se les realiza un previo diagnostico nutricional de peso, talla, y encuesta de consumo de alimentos para ver cómo van sus hábitos alimenticios. Con esa información, se realizan capacitaciones enfocándose en prevenir la anemia y el sobrepeso por malnutrición. Sodexo, además, realiza un seguimiento y monitoreo intensivo después de las capacitaciones, para buscar la sostenibilidad de estos objetivos y logros.

“Desde Sodexo estamos orgullosos de ser un apoyo y participar de esta gran labor realizada en conjunto a Ccori Cocina Óptima y Palmiro Ocampo. En la “Asociación Sodexo por el Desarrollo Sostenible” nos esforzamos en contribuir con componentes de empoderamiento para las mujeres que realizan esta gran labor de dirigir los comedores.” aseguró Cynthia Faura, Gerente de Responsabilidad Social de Sodexo Perú.