La retinopatía diabética es una de las complicaciones más frecuentes que se presenta en las personas afectadas por la diabetes y una de las principales causas de ceguera irreversible debido a que los altos niveles de glucosa en sangre causan daño ocular.

Al respecto, Carlos Wong Morales médico oftalmólogo de la Clínica Wong Oftalmólogos recomendó a las personas afectadas por la diabetes tener presente que al tener mal control de esta enfermedad crónica tienen alto riesgo de sufrir discapacidad visual severa o ceguera total e irreversible.

“La retinopatía diabética se presenta por un mal control de los niveles de glucosa en sangre o porque la persona tiene muchos años con diabetes”, añadió Wong.

La discapacidad visual severa o ceguera total ocurre por el daño a los vasos sanguíneos de la retina del ojo que causa los altos niveles de glucosa en sangre como consecuencia de un mal control de la diabetes.

En tal sentido, el especialista explicó que “la retinopatía diabética ocasiona la dilatación de los vasos sanguíneos de la retina haciendo que haya filtración de sangre lo que lleva progresivamente la muerte de esta parte del ojo y provoca que la persona presente hemorragia masiva, desprendimiento de retina o ceguera total”.

No obstante, también pueden presentar daño a la visión las personas con más de 10 años de diagnóstico de diabetes siendo por ello importante la evaluación oftalmológica de forma periódica.

Los síntomas de esta enfermedad oftalmológica como: ver áreas oscuras o en blanco en el campo visual, ver los colores atenuados o apagados, tener visión borrosa, ver moscas volantes y pérdida de la visión se presentan en la etapa avanzada, es decir, cuando el daño visual ya es irreversible.

A fin de prevenir la retinopatía diabética, el doctor Wong recomienda a las personas con diabetes cumplir el tratamiento médica para mantener niveles normales de glucosa en sangre y prevenir esta complicación. En el caso de las personas con cinco o más años de diagnostico hacerse anualmente una evaluación oftalmológica preventiva porque a mayor tiempo con diabetes se incrementa el riesgo de tener retinopatía diabética.

La mayoría de los casos de retinopatía diabética se puede detectar mediante el examen del fondo de ojo, sin embargo, hay casos en los cuales se puede necesitar una angiografía retinal para poder realizar un estudio de los vasos sanguíneos de la retina y esto a la vez se complementa con una tomografía de coherencia óptica para un mejor tratamiento.

El doctor Wong recomendó a quienes tienen diabetes hacerse anualmente un chequeo oftalmológico de retina para prevenir y/o diagnosticar tempranamente esta complicación ocular, ya que el tratamiento oportuno y adecuado disminuye el riesgo de perder la visión parcial o totalmente.