Las adicciones sexuales, más comunes en hombres debido a la relación con la testosterona, pueden manifestarse como un patrón mal adaptativo que genera una necesidad incontrolable de satisfacer el placer sexual. La Dra. Karen Pérez Maraví, docente del área de psicología de la Escuela de Posgrado de la Universidad Continental, señala que estos comportamientos pueden estar influenciados por factores biológicos, psicológicos, sociales y de personalidad.

Las personas afectadas tienden a desarrollar comportamientos compulsivos como la masturbación excesiva y el consumo desmesurado de pornografía. En relaciones de pareja, priorizan la actividad sexual para evaluar vínculos y suelen aislarse para satisfacer sus deseos sexuales, incluso recurren al sexo virtual.

Entre los síntomas de las adicciones sexuales se encuentran la preocupación constante por el sexo, la compulsión sexual, la dificultad para controlar el comportamiento sexual, el uso excesivo de pornografía, el engaño y ocultamiento, y las consecuencias legales o financieras.

Tratamientos efectivos para las adicciones sexuales:

● Terapia cognitivo-conductual (TCC): identificación y cambio de patrones de pensamiento y comportamiento.
● Terapia de pareja: abordaje de problemas de comunicación, reconstrucción de confianza e intimidad, desarrollo de estrategias conjuntas.
● Medicación: utilizada como parte de un enfoque de tratamiento integral, junto con terapia y apoyo continuo.

«Estas personas hipersexualizadas, cuando tienen una relación amorosa, priorizan la actividad sexual para evaluar vínculos y tienden al aislamiento para satisfacer deseos sexuales, incluso recurren al sexo virtual», añadió la experta.

La Dra. Vargas advierte que, aunque más comunes en hombres, estas adicciones pueden afectar a personas de todos los géneros. Por ello, es fundamental ofrecerles técnicas para reorientar su placer y encontrar formas saludables de ajustar sus vidas y relaciones para reintegrarse a la sociedad.