En el tejido mismo de las dinámicas laborales, los chismes han encontrado un espacio que va más allá del mero entretenimiento. Según los resultados de una encuesta conducida por el Investigador, Profesor y Experto en Management, César Antúnez de Mayolo, el 62% de los colaboradores consultados perciben una presencia significativa de chismes en sus centros de trabajo, una percepción que ha ido en ascenso, especialmente según lo reportado por los líderes empresariales.
Los chismes, como una de las prácticas más habituales pero menos productivas, suelen girar en torno a la empresa, las labores y sus superiores, generalmente basados en verdades parciales que se convierten en especulaciones. El tiempo invertido en estas dinámicas no solo interrumpe la productividad, sino que representa una pérdida financiera para las empresas, las cuales invierten en salarios que podrían optimizarse en actividades más constructivas.
Frecuentemente, muchos directivos optan por no intervenir y lo que es peor, inclusive participar de los chismes. «Es fundamental contar con sistemas objetivos de evaluación del desempeño, apoyados en indicadores concretos y encuestas 360°, los cuales son cruciales para medir el rendimiento laboral», destacó César Antúnez de Mayolo. «Asimismo, fomentar la honestidad y la justicia, y garantizar que los líderes den el ejemplo en sus organizaciones, resulta clave en este escenario».
La adopción de comunicaciones unificadas se presenta como una estrategia efectiva para mantener una dinámica de trabajo armoniosa. La transmisión de información relevante que afecte a todos los colaboradores de manera directa debe realizarse de manera transparente y uniforme. La implementación de entrenamientos y sistemas de comunicación más efectivos puede contribuir significativamente a la resolución de conflictos derivados del chisme en el lugar de trabajo.