Lima.- En el último año, desde la llegada del COVID-19 al territorio nacional, los emprendimientos han cobrado mucho más valor por ser una manifestación de la creatividad, determinación y constancia de los peruanos que no se amilanan frente a la adversidad y buscan abrirse camino hacia un futuro mejor.
Dentro de esta fuerza emprendedora, destacan aquellos modelos de negocio que persiguen un beneficio social, sobre todo los que tienen en cuenta a poblaciones vulnerables o invisibilizadas. En la siguiente nota te presentamos tres emprendimientos peruanos socialmente responsables que buscan la inclusión de personas con discapacidad.
- Sueños Compartidos:
Se estima que en el Perú la cifra de personas con discapacidad auditiva habría superado el millón. Sin embargo, pocas son las personas oyentes que dominan la Lengua de Señas Peruana, reconocida como idioma nativo del Perú y principal método de comunicación de personas sordas, lo que causa exclusión social e invisibilización hacia este grupo.
Sueños Compartidos, empresa creada y liderada por Jade Dávila, brinda talleres de Lengua de Señas Peruana y tiene como propósito crear inclusión y permitir una mejor calidad de vida para los peruanos con discapacidad auditiva. Su misión es lograr que, a través de talleres a empresas y personas naturales, todos los peruanos dominen la lengua de señas y conviertan cualquier espacio, público o privado, en un ambiente inclusivo.
Esta escuela, cuyo único requisito son las ganas de aprender, capacita tanto a personas oyentes, como a personas con discapacidad auditiva y también ofrece cuentos diversos para niños, narrados e interpretados en Lengua de Señas para enseñar a los pequeños a ser personas empáticas y solidarias. “Si aprender una nueva lengua te hace crecer, imagínate todo lo que podrías lograr comunicándote con tus manos”, menciona Jade Dávila, Gerente General de Sueños Compartidos.
- Liberarte:
Primera escuela de teatro musical dirigido a jóvenes con habilidades especiales. Liberarte busca crear un espacio seguro para jóvenes con discapacidad, a través del arte como una actividad terapéutica y sanadora. Estos talleres son dirigidos por el pedagogo Jonathan Oliveros y cuentan con tres disciplinas que encierra el teatro musical: teatro, canto y baile.
Los participantes de los talleres liberan tensiones y estrés a través del juego, vencen la timidez, aprenden técnicas y conocimiento de su voz, desarrollan la vocalización, mejoran sus habilidades psicomotrices y refuerzan relaciones sociales y su autoestima. Actualmente, estos talleres se brindan de forma virtual, por medio de la plataforma Zoom en clases interactivas con el acompañamiento de la familia.
- Pixed:
El 5.2% de la población en el Perú presenta alguna discapacidad; de dicho total más de 210.000 tiene una limitación para moverse, caminar y/o usar brazos y piernas. Esta situación motivó a Ricardo Rodríguez a crear Pixed, un emprendimiento social que busca desarrollar nuevas tecnologías inclusivas y que se generen más oportunidades para este grupo social.
Las prótesis de Pixed son fabricadas a la medida exacta de la extremidad del paciente, por lo que aseguran su buen funcionamiento y comodidad. Además, son construidas con plástico PLA (ácido poliácido láctico), que es eco amigable, sumergible, de fácil fabricación y 80% más económico que una prótesis tradicional. Así, personas de bajos recursos pueden acceder a estas prótesis, además de contar con un acompañamiento psicológico para enfrentar el nuevo desafío luego de obtenerlas.