Un tribunal penal condenó a la ex mandataria a 6 años de prisión por el presunto delito de corrupción.

En concreto, se revisó el proceso gubernamental de los años 2003-2015. La sentencia también inhabilita a la exmandataria a ocupar cargos públicos de por vida.

También habían cargos de haber sido la lideresa de una asociación ilícita. Sin embargo, estos fueron absueltos.