La escoliosis es la deformidad de la columna vertebral, la cual obtiene la forma de una curva estructural. El grado de esta curva determina el nivel de deformidad.
Este problema se hace notar en la etapa de la adolescencia. Además del daño estético, genera un daño funcional pues afecta las habilidades motoras de los afectados.
«Con un debido tratamiento podemos detener este problema, pues el comportamiento de la curva no es fácil de predecir. Es importante enfrentarla desde el inicio, para así controlar su desarrollo», comenta la Dra. Lauren Meléndez (Médico Rehabilitador de la Clínica de Familia de la Municipalidad de San Borja)
Una forma de tratar el problema es el uso de corset y seguir un buen plan fisioterapéutico. Si este plan no da resultados, queda la opción de aplicar una cirugía.
Para detectar la escoliosis se deben tener en cuenta las siguientes señales
- Su hijo tiene una cadera o un hombro que parece estar más alto que el otro.
- La cabeza de su hijo no parece estar centrada sobre el cuerpo.
- Su hijo tiene un omóplato que sobresale más que el otro.
- La cintura de su hijo está plana en un lado o las costillas parecen estar más arriba en un costado cuando se inclina hacia adelante.
Si no se presta atención a estos signos y se identifica el motivo de consulta por dolor en cualquier zona de la espalda, la deformidad aumenta, ocasionando daño estructural, estético y un dolor crónico.
En el centro de rehabilitación de la Municipalidad de San Borja, ubicado en la Clínica de Familia, se realiza la evaluación, seguimiento y tratamiento fisioterapéutico para estos pacientes.
Dicho centro tiene 1 año en funcionamiento y brinda atenciones para enfermedades músculo esqueléticas, atención al adulto mayor y adolescentes afectados por dolor en la espalda. Cabe recalcar que estos cuadros de escoliosis han ido en aumento en estos dos años de pandemia, en los que la educación virtual cobró importancia y los escolares pasaban largas horas frente al ordenador.