Lima.- En el año del Bicentenario del Perú, Antamina cumple 20 años de operaciones comerciales, a través de los cuales, se ha posicionado como una de las empresas mineras más importantes de nuestro país. “Llegando a estos 20 años de operación, podemos decir que nos enorgullece estar entre las empresas más importantes exportadoras de cobre y zinc a nivel nacional”, comenta Víctor Gobitz, Presidente y Gerente General de Antamina.
Y es justamente como consecuencia de estos resultados que la operación minera de Antamina presenta un impacto -directo e indirecto- promedio de 2.9% sobre el PBI nacional y de 43% sobre el PBI de Áncash,
No es sorpresa que, actualmente, la minería representa uno de los mayores motores para la reactivación económica de la región Áncash. Se puede traducir en una contribución total de USD $3,882 millones en canon minero desde que Antamina inició sus operaciones.
El proyecto de Antamina, luego de 20 años de operaciones, es el de optimizar la unidad minera para así extender su vida útil (exploraciones en profundidad y planificación de la infraestructura) y maximizar su rentabilidad (innovación y tecnología, mayor tiempo efectivo, menores costos operativos, hojas de ruta, mecanización y eliminación de ‘cuellos de botella’).
En cuanto al ámbito social, durante estos 20 años, Antamina asumió el compromiso de contribuir con la región Áncash en impulsar el crecimiento de múltiples sectores, a través de diversas iniciativas. La compañía puso el hombro desde el inicio de la pandemia, donde sus colaboradores fueron su principal preocupación; renovando sus protocolos de salud y seguridad, y construyendo una nueva cultura de bioseguridad, a partir de un Plan Integral de Gestión.
Actualmente, gracias al convenio firmado con la DIRES Áncash, brinda apoyo logístico para el proceso de vacunación en esta región. Este soporte al Plan Integral de Vacunación de la DIRES Áncash considera hasta 108 brigadas de inmunización, movilidad y equipos para la cadena de frío. Con ello, se tiene planificado garantizar la vacunación de más de 800 mil ancashinos. Asimismo, se ha dotado de insumos y equipos médicos a centros de salud, incluyendo la donación de cinco plantas de oxígeno, considerando también a la región de Huánuco.
En la búsqueda constante de mejorar la salud de los niños, impulsan el proyecto Wiñantsik -conjuntamente al Programa Mundial de Alimentos de la ONU- con la objetivo de promover la intervención familiar, la participación comunitaria y la articulación gubernamental para la reducción de la anemia y desnutrición crónica en niños menores de cinco años.
Convencidos que la educación es una herramienta clave para el desarrollo, desde el 2017, Antamina ha impulsado el programa “Efecto Áncash”, con el apoyo de la UGEL Huari y Enseña Perú, contribuyendo a mejorar la calidad y disminuir la brecha educativa, beneficiando a más de 5,000 estudiantes.
La inversión para el cierre de las brechas de infraestructura social y productiva ha colocado a la compañía en el primer lugar en el ranking de ejecución de Obras por Impuestos (OxI) con un monto adjudicado que supera los S/ 2,024 millones de inversión, a nivel nacional, en el uso de este mecanismo.
Ello sumado al compromiso de continuar con las obras del Hospital de Huarmey y el Hospital de Llata e iniciar la ejecución del Hospital de Huari y del Hospital de Huaraz, el Colegio de Alto Rendimiento de Áncash COAR y los proyectos de riego de Yamor y Valle Purísima.
“Nos sentimos profundamente orgullosos de pertenecer a la comunidad de Áncash desde hace 20 años. Hemos pasado momentos difíciles que solo hemos logrado superar trabajando en conjunto con el gobierno regional, las autoridades, la sociedad civil y nuestros colaboradores, y estoy seguro de que continuará siendo así. Nuestro compromiso con la comunidad ancashina es perenne”, aseguró el presidente de la compañía.
Con ello, Antamina reafirma su compromiso por seguir apoyando en el desarrollo positivo de la región Áncash, en aras del bienestar y crecimiento de sus vecinos ancashinos.