La provincia cusqueña de Espinar se ubica a 4 mil metros sobre el nivel del mar, allí se encuentra el Hospital I Espinar del Seguro Social, el cual cuenta con un equipo de profesionales altamente especializados, que tienen la sublime misión de proveer múltiples servicios, que contribuyen a que las gestantes que viven en zonas alto andinas, accedan a una atención integral, para traer al mundo a sus bebés en las mejores condiciones.
El gerente de la Red Asistencial en Cusco, Dr. Carlos Meza Vilca, destacó los esfuerzos que se realizan para fortalecer las prestaciones de salud en hospitales ubicados en los lugares más alejados de nuestro país, como este, con la finalidad de fortalecer las atenciones médicas antes, durante y después del parto.
“El hospital I Espinar es un claro ejemplo de que a pesar de las nuevas condiciones de atención que nos exige la pandemia por Covid-19, se optimiza la oferta de servicios para esta práctica médica. Desde que empezó la pandemia a la fecha, se atendieron 140 partos y en los casos de mayor complejidad [partos por cesárea] se realizaron 17 referencias al Hospital Nacional Adolfo Guevara Velazco”, comentó el funcionario.
La pandemia por Covid-19 ha impactado también la salud materna, sin embargo, desde el Seguro Social, se puso especial interés en este grupo vulnerable, a fin de que no dejen de acceder a los servicios de salud mediante una atención oportuna con calidad y calidez.
Sobre el tema, la obstetra del Hospital I de Espinar, Jeannete Quispe, destacó la incorporación del enfoque intercultural en la atención del parto en este establecimiento de salud. Señaló, que ello les permite escucharlas, conocer sus necesidades, sus particularidades, individualidades y creencias sobre lo que consideran son las mejores prácticas para el momento de alumbrar a su bebé.
Pero otros factores contribuyeron también a que las gestantes de comunidades alto andinas de la provincia de Espinar se sientan cómodas en los servicios de este hospital de EsSalud, como es, la construcción del vínculo, madre, padre y el bebé recién nacido.
La obstetra Quispe Díaz, informó, que, bajo el cumplimiento de estrictos protocolos de bioseguridad, se incluyó durante el nacimiento, la presencia del padre, ya que su cercanía pone a la madre en condiciones de mayor confort y seguridad.
Se creó un fuerte vínculo de unión y apego con este trinomio. Ellos [los papás] al ser testigos de la llegada de un nuevo ser, muchas veces llegan a emocionarse hasta las lágrimas. Están con sus esposas en el momento del parto y en el inicio de la lactancia materna”, comentó la especialista.
Entre los servicios que se brindan en el Hospital I de Espinar del Seguro Social, destacan: los controles pre natales, monitoreo fetal de las gestantes, atención de partos, puerperio, planificación familiar, sesiones de psicoprofilaxis, charlas de orientación a las adolescentes, entre otros.
Asimismo, como parte de los protocolos establecidos en el tratamiento y manejo de atención de la gestante, se toman pruebas moleculares para descartar el nuevo coronavirus. Los ambientes del nosocomio cuentan con filtros de aire y se han acondicionado accesos diferenciados en salvaguarda de la madre y la de su bebé, así como del personal médico y de los usuarios.
Cabe mencionar que en lo que va de la emergencia sanitaria, en los hospitales que conforman la Red Asistencial Cusco, se incorporaron 128 profesionales de la salud, para reforzar la atención Covid-19 así como lograr la promoción del control pre natal y atención del parto a gestantes aseguradas de EsSalud.