Lima.- La emergencia sanitaria originada por la pandemia de la COVID-19 no solo trajo un impacto negativo a la salud pública del país, sino, además, a los bolsillos de las familias peruanas. Frente a este panorama, se han planteado ciertas acciones para aliviar la presión económica, como la entrega de bonos familiares y la aprobación para el retiro de fondos de la AFP hasta por S/ 17,600 y hasta el 100% de las CTS.
“Estamos frente a una situación compleja que debe ser analizada con detenimiento. Tanto la CTS como la AFP son beneficios que tienen un propósito claro con mirada hacia el futuro; la CTS en caso de culminar la actividad laboral en una entidad y la AFP al jubilarse. Por ello, disponer de este dinero en el presente, y no tener un plan concreto e inteligente para invertir este dinero, puede suponer un gran perjuicio para nuestra tranquilidad y economía futura” explicó la Mg. Lourdes Beriche Lezama, docente de la Universidad Norbert Wiener.
Para conocer algunas recomendaciones puntuales para el uso inteligente de nuestros fondos si ya hemos decidido retirarlos, la especialista nos brinda la siguiente información:
- Movilizar nuestro dinero a entidades financieras sólidas que generen intereses. Para conocer las diferentes tasas que existen en el mercado podemos informarnos en www.sbs.gob.pe
- Destinar un porcentaje del dinero para casos de emergencia en el futuro. Así tengamos un plan de inversión, es importante destinar una cantidad del dinero para ahorrarla y tenerla como un fondo de emergencia.
- Invertir en una microempresa con planificación previa y con miras a la expansión y formalización.
- Aportar al ahorro previsional voluntario de la AFP. Con los aportes voluntarios es posible no perder el beneficio de recibir una pensión en el futuro.
- Colocar un porcentaje del dinero para amortizar el capital de un préstamo financiero adquirido, liberando un gasto mensual de intereses.
La especialista menciona, también, que dentro de los errores más comunes que cometen las personas al utilizar este tipo de retiros son la compra de bienes innecesarios, viajes, entre otros gastos superfluos. “Si no tenemos un plan definido de inversión o gastos de primera necesidad que no pueden ser cubiertos, lo más recomendable es no hacer uso de nuestros fondos futuros. Las decisiones apresuradas pueden ser sumamente perjudiciales para nuestra economía y la de nuestra familia”, indicó Beriche.