Un niño de 2 años es uno de los más de 7 millones de personas que ejercerán su derecho a la salud mediante las teleconsultas

Nadeshysa Silvera Chiclla, de 23 años, vive en el Anexo Pulpería del distrito Pampachiri, provincia de Andahuaylas, en la región Apurímac. Es madre de dos pequeños y uno de ellos presenta labio leporino y fisura de paladar. Hoy, el menor de dos años, de iniciales F.E.T.S., es uno de los pacientes atendidos a través de la estrategia de Telemedicina “Rikuyki”, implementado por el Ministerio de Salud (Minsa) a fin de acercar los servicios diferenciados de telesalud a poblaciones vulnerables del país.

El 11 de noviembre del presente año, Nadeshysa acudió con su pequeño hijo al Centro de Salud de la Comunidad de Pampachiri – Apurímac donde recibió la atención de Telemedicina mediante teleinterconsulta con el servicio de cirugía plástica y reparadora del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) de Breña.

En la interconsulta se logró la referencia para la evaluación presencial con el cirujano plástico, exámenes preoperatorio y programación de cirugía. Desde el 22 de noviembre, la madre y su hijo ya se encuentran el Lima para pasar por los exámenes correspondientes.

“Un doctor del Centro de Salud de Pampachiri me ayudó a obtener una teleconsulta con el Hospital del Niño de Breña y luego tuve que viajar a Lima. Antes no había esta atención en mi pueblo, pero gracias a la Telemedicina ahora mi hijito está pasando por sus análisis para que pueda ser operado en Lima”, cuenta emocionada Silvera Chiclla.

Así como el pequeño de dos años, otros siete millones de ciudadanos en estado de vulnerabilidad ejercerán su derecho a la salud mediante la estrategia “Rikuyki” –término quechua que significa “Te veo”–; la misma que busca facilitar y acercar los servicios de salud de manera virtual.

“Los beneficios de la Telemedicina son múltiples. Cuando nosotros accedemos a esta atención evitamos el tiempo de transporte para el desplazamiento. Al hacer uso de la Telemedicina hacemos que el usuario que no puede llegar a la consulta especializada, llegue desde el lugar donde se encuentra”, explica la Dra. Bernardette Cotrina, directora general de la Dirección General de Telesalud, Referencia y Urgencias (Digtel) del Minsa.

En el contexto de la pandemia de la COVID-19, Cotrina sostiene que es fundamental el uso de las teleconsultas y que la Telemedicina –asegura– “ha llegado para quedarse y estar al servicio del ciudadano”. “La Telemedicina en la pandemia ha sido un eje fundamental para mantener la prestación activa, porque podemos lograr con el usuario a que mantengamos el distanciamiento social”, indicó la funcionaria.

Lanzamiento de “Rikuyki”

Precisamente, este martes 30 de noviembre, el Ministerio de Salud, a través de la Dirección de Telemedicina de Digtel, lanzó la estrategia “Rikuyki” que busca facilitar y acercar los servicios diferenciados de telesalud a poblaciones indígenas u originarias, penitenciaria y fronteriza, así como a personas con discapacidad, en condición de pobreza y pobreza extrema.

El lanzamiento estuvo presidido por el jefe de Gabinete del Despacho Ministerial del Minsa, Julio Castro, quien destacó que “esta estrategia nos permite llegar a poblaciones normalmente excluidas de la atención de salud de todo tipo, principalmente, comunidades indigentes de frontera o comunidades campesinas”.

“El Minsa deja de ser los establecimientos que están a la espera de los pacientes para convertirse en un equipo sanitario que va en busca de los hombres y mujeres del país”, agregó el funcionario del Minsa.

Con el uso de la tecnología, la estrategia “Rikuyki” permite brindar atención médica a distancia y de forma oportuna a las poblaciones más vulnerables del país, superando barreras como la ubicación geográfica, diferencias lingüísticas, condiciones de salud física y privación de la libertad.

Durante el lanzamiento se transmitió en vivo el desarrollo de sesiones de Telemedicina en simultáneo desde diferentes puntos del país: cuatro establecimientos penitenciarios (Huánuco, Santa Mónica – Chorrillos, Anexo Mujeres – Chorrillos, Virgen de Fátima), en el Centro de Salud de la comunidad de Umamarca, en Apurímac, los puestos de salud Monte Salvado, ubicando en la frontera de Madre de Dios y Andarapa, en Apurímac.

“Rikuyki” permitirá atender a más de 7 millones de personas en estado de vulnerabilidad, tales como poblaciones indígenas u originarias (2 953 739), población penitenciaria (87 332), población de zonas fronterizas adscritas a las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud – IPRESS (635 276), población con discapacidad (3 209 261), así como población en pobreza y pobreza extrema del Programa Juntos (673 812).

Dato:

Antes de la pandemia, mediante telemedicina, se atendían a 250 personas por día; hoy se brindan aproximadamente 31 000 teleconsultas a diario, sumando a la fecha más de 34 000 000 de atenciones a distancia. Actualmente, el país cuenta 2664 establecimientos de salud incorporados a la Red Nacional de Telesalud.