Lima.- El Ataque Cerebrovascular (ACV) constituye la segunda causa de muerte en el mundo y una de las principales causas de discapacidad, según la información del Organización Mundial de la Salud (2019) (OMS)1. Además, se predice que 1 de cada 4 personas, tendrá un ACV en algún momento de su vida2. En cuanto a Perú, de acuerdo con el último reporte del Ministerio de Salud (2018), esta patología constituye la segunda causa de muerte y se estima que tiene una incidencia de 100 por 100,000 habitantes3.

Pero ¿qué es el ataque cerebrovascular? El Dr. Carlos Abanto, Presidente de la Sociedad Peruana de Neurología, explica que existen dos tipos de ACV o también conocido en el país como “derrame cerebral”: el isquémico (80%), debido a la obstrucción de un vaso sanguíneo cerebral; y el hemorrágico, ocasionado por la ruptura del vaso sanguíneo (20%). El ACV isquémico, es el trastorno neurológico más frecuente en la población. Este es originado cuando el flujo de sangre hacia el cerebro se interrumpe por el bloqueo, que produce la presencia de un coágulo, en una arteria del cerebro. Como consecuencia de esta obstrucción, parte del cerebro no recibe flujo y se priva de oxígeno, ocasionando daño de forma permanente (muerte de una porción del cerebro) o transitoria.

Un gran porcentaje de los casos son prevenibles, de allí la importancia de identificar a tiempo los síntomas y, sobre todo, actuar con velocidad ante los posibles casos de ACV. De este modo, explica cuáles son los signos de alerta del inicio de un ACV, a fin que puedan reconocerse en casa.

·Parálisis de un lado de cuerpo: Puede ocurrir “adormecimiento”, debilidad o parálisis de manera brusca en un lado del cuerpo. Solicitar al paciente que levanta ambos brazos y observar su uno de estos cae y al sonreír, si un lado de su boca se desvía.

·Alteración del habla o del lenguaje: El paciente de manera súbita, experimenta dificultad para articular las palabras o para entender lo que se dice o no puede hablar.

·Trastornos de los campos visuales: Se puede tener visión borrosa u oscurecida, o en algunos casos, puede ver doble.

·Dolor de cabeza: Presencia de dolor fuerte de cabeza, de un momento a otro. Este puede estar acompañado de mareos, náuseas y vómitos; incluso trastorno de conciencia.

Inestabilidad para caminar: Puede perder el equilibrio o tropezar. Además, tener un mareo repentino.

“La detección precoz y atención médica oportuna, dentro de las 4.5 horas es vital; reconocer los síntomas del ACV y recibir tratamiento con prontitud salva vidas y mejora las opciones de recuperación. Tiempo es cerebro y tiempo perdido es cerebro perdido. Los familiares o personas cercanas al paciente cumplen un rol muy importante. Ante un posible caso de ACV, pueden llamar a los Bomberos (116) o al Sistema de Atención Médica de Urgencias, SAMU (106) para un traslado seguro” precisó el especialista.