Existen docenas de productos especializados para el cuidado y restauración del cabello. Sin embargo, dos de ellos suelen ser confundidos entre sí: el acondicionador y la mascarilla nutritiva. Pero ¿son lo mismo? Descubre los mitos y verdades acerca de cada uno y por qué son esenciales para tu rutina cotidiana.

●      La mascarilla y el acondicionador son lo mismo: MITO

¡Esto es falso! Muchas personas suelen pensar que la mascarilla es tan solo un acondicionador más denso. Sin embargo, son dos productos completamente distintos. El acondicionador hidrata el cabello, reduce el frizz y ayuda a desenredarlo desde el momento en que lo lavas. La mascarilla, por otro lado, es una mezcla de óleos, nutrientes, suavizantes y fortalecedores que brindan diferentes beneficios.Tratamientos como los de Pantene cubren una gran gama de cabellos e incluyen diferentes insumos naturales como el aceite de ricino, extracto de bambú, biotina, entre otros para aliviar problemas como frizz y quiebre.

●      Si uso una mascarilla, ya no debo utilizar el acondicionador: MITO

El acondicionador es un paso indispensable en tu rutina de lavado de cabello, junto al shampoo. Sin embargo, el uso del acondicionador no anula el de la mascarilla y viceversa. El primero hidrata tu cabello mientras que el segundo, nutre profundamente, dejándolo suave y hermoso. Utilízala de una a dos veces a la semana, o de acuerdo a lo que tu cabello requiera.

●      Hay una mascarilla especial para cada tipo de cabello: VERDAD

Todos los cabellos son diferentes, y una misma mascarilla puede serle útil a alguien con cabello rizado, pero no a una persona con cabello lacio o químicamente tratado. Por eso, Pantene tiene diferentes opciones con ingredientes como óleos, proteínas y nutrientes para el cabello con rizos, lacio o teñido. Por ejemplo, su mascarilla Bambú, Nutre y Crece*, por ejemplo, te ayudará a combatir la caída y debilidad gracias a su fórmula con aceite de ricino y extracto de bambú.

●      La mascarilla solo se puede aplicar luego de lavar el cabello: MITO

El cabello no necesita estar recién lavado para que la mascarilla funcione de manera correcta. Una opción es aplicarla luego de enjuagar shampoo y acondicionador, pero también es posible colocarla sobre el cabello húmedo y dejarla actuar. La clave es que debe ir de medios a puntas, y enjuagar después del tiempo indicado. Al secarse, tu cabello se sentirá más suave, sano y nutrido que nunca.