Lima.- El factor que más impacta en el proceso educativo de los estudiantes es el docente. Son los docentes quienes formarán a los futuros líderes del país desde sus primeros años de vida; por eso, como sociedad, es vital revalorar la profesión, ofrecerles oportunidades de mejora continua desde la formación inicial y motivar a los mejores profesionales hacia la enseñanza.

Teniendo los docentes un rol tan importante en el desarrollo del país, es fundamental ahondar, un poco más, en la situación actual de la formación inicial docente. En el Perú, el 60% de los docentes se forma en los institutos pedagógicos. Sin embargo, su formación no viene siendo la adecuada. De acuerdo a la Prueba Única Nacional del 2019, el 100% de egresados de estos institutos no superó la subprueba de conocimientos pedagógicos; el 80% no aprobó razonamiento lógico y el 41% desaprobó comprensión lectora.

“Son varios los factores que se necesita considerar para resolver esta problemática: fortalecer los institutos pedagógicos en cada región, contar con mejores formadores de los docentes, dar las condiciones para que la formación permita lograr el perfil esperado y ser capaces de atraer a los mejores estudiantes a esta formación profesional”, explica Mercedes García de Valenzuela, Presidenta del Comité Estratégico de Educación de IPAE y líder de la comisión.

Para encontrar una solución, y continuando con su compromiso por el desarrollo y el futuro del país, IPAE Asociación Empresarial presenta la #RutaPerú en Educación “Medidas urgentes para mejorar la formación inicial docente”. Esta tiene como objetivo promover mejoras importantes en los procesos de formación inicial de los docentes, gracias a los aportes y experiencias de los miembros de la Comunidad de Líderes de Educación de la institución.

La ruta se resume en cuatro grandes propuestas:

  1. Impulsar el fortalecimiento institucional de los institutos pedagógicos. Para ello, se debe promover la optimización de los institutos pedagógicos con enfoque territorial. Para lograrlo, cada gobierno regional (GORE) deberá presentar al Ministerio de Educación (Minedu) una propuesta de reordenamiento y reorganización que responda a las demandas de perfiles de docentes identificados en su región. También es indispensable que cada GORE identifique en el más breve plazo (a más tardar en el 2022) a un instituto pedagógico como referente regional, al cual deberá fortalecer y asignarle recursos, con el fin de que cumpla con los criterios y condiciones básicas de calidad. Finalmente, es necesario definir MEJOR los niveles de autonomía institucional de los institutos pedagógicos y escuelas pedagógicas.
  1. Captar y preparar a los mejores formadores de docentes. La #RutaPerú recomienda mejorar los procesos de selección e inducción de los formadores y directores de los institutos pedagógicos; evaluar a los actuales formadores y fortalecer sus capacidades; generar incentivos para que los mejores docentes y directores puedan desempeñarse como formadores; permitir que profesionales de distintas carreras -como psicólogos especialistas en niños y adolescentes, científicos, historiadores, lingüistas, matemáticos y otros especialistas- puedan enriquecer la experiencia formativa de los futuros docentes.
  1. Promover que la formación inicial docente garantice las competencias básicas. Con el objetivo de contar con mejores docentes, se deben establecer requisitos de ingreso que aseguren que los estudiantes que inicien la formación tengan la posibilidad de cumplir con el perfil de egreso, en concordancia con el currículo nacional de la educación básica; implementar un proceso de diagnóstico inicial de los estudiantes, a partir de una evaluación de ingreso, de observación y de entrevistas; promover que los estudiantes adquieran experiencia en la práctica docente desde el primer año de formación, en alianza con escuelas públicas y privadas referentes, previamente seleccionadas.
  1. Captar a los mejores estudiantes para convertirse en los futuros docentes. Para lograrlo, se deben mejorar las condiciones laborales y salariales de la carrera; implementar campañas públicas de revalorización y reconocimiento del rol docente; crear programas de sensibilización, orientación vocacional y nivelación con miras a la entrega de becas especiales para la formación docente. También se considera conveniente promover programas de doble titulación en las universidades para estudiantes de otras carreras, incluyendo en su formación cursos que los certifiquen como docentes; y permitir que las universidades ofrezcan nuevamente programas de complementación pedagógica, como sucede en el caso de los institutos pedagógicos, con el fin de promover la profesionalización docente en profesionales que terminan otras carreras.

“Nuestro país necesita docentes que inspiren; por ello urge revalorar esta profesión en la sociedad y potenciar el rol del maestro. Así, como se ha detallado en el presente documento, resulta fundamental profesionalizar la carrera y atraer el mejor talento, dando las condiciones necesarias para exigir que la formación logre el perfil que permita transformar verdaderamente la educación peruana”, finalizó Mercedes García de Valenzuela.