En el Día Mundial de las Aves Migratorias, la Reserva Nacional de Paracas (RNP), en la provincia de Pisco, evidencia la belleza y diversidad biológica que albergan sus playas y costas, donde existen más de 14.5 millones de individuos de aves agrupadas en 148 especies, entre las que hay migratorias como los flamencos o parihuanas, los playeritos y vuelvepiedras, gaviotines reales, gaviotines elegantes o los antárticos, que son monitoreadas y registradas por el Programa de Monitoreo Marino Costero (PMMC) del Consorcio Camisea.

El Día Mundial de las Aves Migratorias se celebra dos veces al año, el segundo sábado del mes de mayo y de octubre, para concientizar a la población sobre la conservación de estas especies y sus hábitats, sensibilizar sobre las amenazas que enfrentan, su importancia ecológica y la necesidad de cooperar para conservarlas.

La importancia de la Reserva Nacional de Paracas como espacio turístico –o ecoturístico– a unas 3 horas al sur de Lima, es crucial para los viajeros emplumados que llegan desde distintos rincones del mundo en busca de alimento. Es por eso que Paracas fue en años pasados, sede de la Cumbre Internacional de Aves Migratorias.

Además de las aves, también se han registrado lobos marinos, insectos, fitoplancton y una diversidad de flora, informó Camisea en un taller virtual (con universitarios y autoridades locales), donde mostró los resultados del monitoreo de especies en la Reserva Nacional de Paracas (RNP).

El PMMC se encarga de evitar, minimizar, restaurar o compensar algún impacto ambiental en la bahía de Paracas, donde está la Reserva Nacional de Paracas, mediante los mapas de sostenibilidad, gestión integral de residuos, registro de la calidad de aire o agua, y el monitoreo participativo con grupos de interés locales.